Cusco tiene excelentes artistas y artesanos desde la época del imperio del inca. Debido a la variedad de culturas y regiones naturales, ha hecho que cada parte tenga diferente forma de ver la vida. El Arte capta las estas vivencias y las plasma en arcilla, metal, tela o madera.

El arte popular del Cusco posee una riqueza expresiva que no solo se concentra en la ciudad y las regiones donde se asentaron los centros de desarrollo prehispánico o colonial, sino también en lugares como la selva, donde los grupos del amazonas mantiene una extraordinaria tradición artesanal.

La Imaginería del Cusco

Tiene su origen en el siglo XVI. Los españoles traían como regalo de sus reyes a los habitantes del nuevo continente imágenes sagradas de famosos autores, siendo destinados a las iglesias y templos parroquiales.

Artistas, en especial cusqueños, ante la demanda del lugar, se especializaban creando imágenes parecidas a las anteriores, imprimiendo a sus obras un sello propio, dando origen a la Escuela Cusqueña.

El Temas utilizado por los «imagineros» de la época en Cusco, fue el Nacimiento, introduciéndose primero en las celebraciones y luego en fiestas patronales.

Tenemos por ejemplo en la celebración que hasta podemos apreciar, la del «Santurantikuy» (compra-santa) en el Cusco durante la víspera de Navidad, donde se instalaba una feria regional. Esto dio lugar a que se comercializaran las imágenes, floreciendo de ese modo el Arte de los Imagineros. Los primeros representantes fueron los artistas de orígenes incas:

  • Diego Quispe Tito
  • Juan Tomas Tuyru Tupac

Con el tiempo, a las escenas del Nacimiento, denominados también «Belenes», se le incorporaron personajes propios del mundo andino como los pastores, los Reyes Magos y otras representaciones costumbristas.

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